«Nos preocupa el crecimiento del comercio informal, la violencia y la incertidumbre política y social que provoca el borrador de la nueva Constitución”

Desde octubre del 2019 que el aumento de la violencia contra el comercio en diversos sectores de Santiago y del país ha puesto en jaque a diversos gremios comerciales, a las autoridades y a la ciudadanía en su conjunto.
Tradicionales sectores como Plaza Italia, Barrio Meiggs, Lastarria y la zona de La Araucanía, por nombrar algunos, han debido cerrar o se han vuelto intransitables por los constantes actos vandálicos que han afectado fuertemente a comerciantes y sus inversiones, muchos de los cuates han debida cerrar por falta de seguridad o derechamente han quebrado por falta de recursos.
Asítambién fo considera el presidente de la Cámara Nacional de Comercio (CNO), Ricardo Mewes, quien preocupado por la situación de extrema violencia de la que son víctimas locatarios, emprendedores, pymes y empresarios, alza la voz para señalar que los principales factores de preocupación para el sector «son el crecimiento del comercio informal, la violencia que afecta a los locales y trabajadores, y la incertidumbre que estamos enfrentando en materia política y social con el borrador de la nueva Constitución? destacando que de seguridad somos uno de los gremios más afectados, por lo que hacemos un llamado al Gobierno a trabajar de manera coordinada para lograr frenar la espiral de violencia que está viviendo nuestro país” En este contexto, el líder gremial profundiza en esta entrevista con E-negocios sobre el propósito que mueve hoy a la CNC ante este complicado escenario, las principales preocupaciones del gremio y cómo se han visto afectadas las inversiones del mundo empresarial y del comercio, corno también las medidas que deberían tomar las autoridades para mantener la seguridad y estabilidad económica del país, entre otras temas. -Con más de un siglo de existencia en nuestro país, ¿Cuál ha sido el propósito de la Cámara Nacional de Comercio en todos estos años, y cuáles son sus objetivos principales el día de hoy, con un Chile convulsionado, un escenario post pandemia y altos índices de delincuencia? El propósito del gremio es representar la voz de los socios ante fa opinión pública y ser el principal referente del sector, convirtiéndonos en un interlocutor válido frente a las autoridades a nivel nacional, defendiendo al comercio formal sus trabajadores y consumidores. Nuestro principal objetiva ha sido sacar adelante al sector, en especial a las pymes, que durante estos años de pandemia lo han pasado bastante mal. También la formalización de las pymes mediante capacitaciones y entrega de herramientas para ello, en coordinación con el Ministerio de Economía. Junto con ello, hemos luchado de manera permanente contra el comercio informal que inunda nuestras calles y redes sociales, mostrando los beneficios de la formalización.
Por último, y lo más importante, nuestros comerciantes necesitan que se les garantice la seguridad para poder seguir trabajando, fo que hasta el día de hoy aún no ocurre. -En la actualidad, ¿cuáles son las principales preocupaciones de la CNC, considerando las altas cifras inflacionarias, de bajo o nulo crecimiento, graves hechos en barrios comerciales, terrorismo en La Araucanía, y una eventual futura nueva Constitución ? Las principales preocupaciones del gremio es el crecimiento desbordado de la informalidad, la violencia que afecta a los locales y trabajadores del sector y la incertidumbre que estamos enfrentando actualmente, en especial en materia política y social, con el borrador de la nueva Constitución.
Que los hechos de violencia que se viven en Santiago y diversas regiones del país, junto con la inestabilidad política que genera el trabajo de la Convención Constitucional, son el mayor factor de incertidumbre en la economía nacional? La incertidumbre económica que estamos atravesando es fruto de distintos acontecimientos, que van más del tema de violencia que estamos atravesando.
Por un lado, tuvimos en 2021 un año de crecimiento histórico, impulsado por los retiros y ayudas fiscales, donde el consumo privado fue el gran protagonista, pero fa liquidez no es eterna y ya se ven signos de desaceleración, acompañado de una alta inflación, que responde a esta gran liquidez como también a factores externos. Entonces nos enfrentamos a un escenario de decrecimiento y alta inflación, lo que hace más difícil usar política monetaria o fiscal para acelerar el crecimiento sin afectar aún más la inflación.
Esto ya en sí produce incertidumbre y a esto se suma la incertidumbre internacional, con la guerra Rusia-Ucrania, que está teniendo fuertes efectos en la economía global, en los precios y en el abastecimiento internacional y donde nadie puede predecir qué es lo que va a pasar ahí o cuando acabará.
Luego se suma el ambiente político interno que estamos viviendo, un proceso constituyente que no está dejándole el camino fácil a la inversión y donde se ven varias incertezas y problemas de aplicación e interpretación de algunas normas. -¿ Cómo se han visto afectadas las inversiones del mundo empresarial y del comercio ante el negativo escenario local? EI PIB del primer trimestre creció menas de fo pensado y marcó una baja en términos desestacionalizados respecto al trimestre anterior, dando cuenta de una desaceleración tras el fuerte impulso de 2021. Los resultados del primer trimestre muestran una desaceleración en la demanda interna, marcada justamente por un mayor descenso en la inversión y una baja en las exportaciones netas. De hecho, lo que más preocupa hay es fa inversión, que marcó en términos desestacionalizados una baja de 5,9% respecto al trimestre previo y donde no se ve que se estén activando nuevas iniciativas.
Respecto a las inversiones inmobiliarias sector comercio, el informe realizado por el Departamento de Estudios de la CNC, que incluye proyectos inmobiliarios en ejecución y estudio de US$3 millones y más, alcanzó un monto de millones a diciembre de 2021 y evidenció una baja respecto al cierre de junio 2021 debido a la salida de proyectos por un total de US$ 232,3 millones, de los cualesel40% nunca se ejecutaron, es decir, son proyectos que estaban en estudio, pero se bajaron. Á su vez, se ajustaron a la baja las cifras de varios proyectos que estaban en carpeta y hubo una débil entrada de iniciativas durante el segundo semestre del año pasado. Los resultados entonces alertan de una bajísima materialización de proyectos, permaneciendo estos en etapa de estudio a la espera de ponerse la primera piedra.
De hecho, de los proyectos que venían ya en estudio a junio de 2021, ninguno se ha materializado aún. -¿ Qué tipo de acuerdos o medidas debería aplicar el Gobierno para mantener la seguridad y estabilidad económica del país? Acá estamos hablando de dos temas que, si bien se deben abordar de manera separada.
En materia económica, y dado la inminente desaceleración que estamos viviendo, junto a fuertes presiones inflacionarias, es de suma urgencia dar claridad, eliminar desconfianzas, bajar expectativas y proponer medidas pro crecimiento, enfocadas sobre todo en la recuperación de la inversión, como mencioné anteriormente, y la recuperación del empleo formal. En materia inflacionaria también es necesario que el Gobierno mantenga un gasto público acotado.
En materia de seguridad somos uno de los gremios más afectados, las cifras de nuestra última encuesta de victimización así lo demuestran, y es por ello que hemos hecho un llamado al Gobierno a trabajar de manera coordinada tanto el sector público como el privado para, entre todos, lograr frenar la espiral de violencia que está viviendo nuestro país. -Por otro lado, ¿cómo se ha visto afectado el comercio con el alza de los precios y altas cifras de inflación, qué superó el 10% el último mes? Hemos visto un fuerte incremento en los precios en varios bienes de consumo, sobre todo por el lado de los alimentos.
Claramente la mayor inflación, donde según el Banco Central un tercio corresponde a factores externos y dos tercios a internos, está afectando el poder adquisitivo de los hogares y con esto debiera afectarse también sus decisiones de consumo, sobre todo de bienes que no son de primera necesidad. A su vez, las mayores tasas también afectan el consumo al encarecerse los créditos.
A su vez, el sector ha experimentado un fuerte incremento en tos costos, la gran mayoría de los bienes del retail son importados, por lo que el alza del dólar, problemas de abastecimiento, fuerte incremento en los costos de transporte, entre otros, está afectando fuertemente los márgenes. -Finalmente, ¿cómo proyecta el escenario económico local y a nivel de inversiones para lo que queda del 2022 y los próximos años? El último IPo M da cuenta que estamos atravesando tiempos difíciles, donde han aumentado los riesgos tanto internos como externos.
Por un fado, se subió fuertemente la proyección de inflación, la cual responde en gran parte al fuerte aumento de liquidez durante el año pasado, dado los retiros y ayudas fiscales, y por el cual estamos ahora pagando las consecuencias, El Banco Central aumentó sus perspectivas de crecimiento para este año, pero se espera una recesión el próximo.
Si bien el consumo ha seguido fuerte en la primera parte del año, precisamente porque aún se mantiene parte de esta mayor liquidez, creemos que a partir del segundo semestre comenzaremos a ver fuertes caídas en el consumo de bienes.
La mayor preocupación viene por el lado de la inversión, donde en términos desestacionalizados, cayó el primer trimestre respecto al anterior y las estimaciones para el cierre del año se corrigieron a la baja, esperando una caída de 4,8% para este año y 2,2% para el otro. El escenario no es fácil, las mayores tasas de interés, producto de la alta inflación que estamos enfrentando, encarecen el crédito y difícil aún que repunte la inversión, junto a mayores costos de construcción.
A esto se suman confianzas empresariales que se deterioran en gran parte por el escenario político que estamos atravesando, con altos niveles de incertidumbre, que frenan las proyectos al no tener claridad sobre cómo la futura regulación los podría afectar.
Tenemos entonces un gran desafío por delante en materia de inversión, ser capaces de dar certezas para que proyectos en estudio se materialicen y enfocar las políticas públicas en orden de atraer la entrada de nuevas iniciativas, Sin inversión será imposible recuperar el crecimiento en el largo plazo.

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